Nada más entrar en Salces puedes encontrar dos salas de estar. Una es más pequeña (qué podéis ver en la foto principal) y la otra más grande. Ten cuidado en la grande porque muchos socios juegan a quitar la tabla que soporta los cojines verdes y más de uno se ha dado una sorpresa.
Estas salas han “asistido” a numerosas charlas y tutorías, clases y catecismo.