El 2 de enero tuvimos un desayuno con chocolate con churros. La idea era coger fuerzas para poder cantar villancicos en la residencia de ancianos de la Fundación Catalina Suárez, que está en Avenida Ciudad de Barcelona, en el barrio Pacífico. Y así fue, después de reponer fuerzas el coro solidario improvisado de Salces se puso rumbo a la residencia. Allí pudimos cantar villancicos tradicionales y tocar la pandereta a “tutiplen”. ¡Da gusto escuchar a tantas familias y ancianos cantar villancicos en estas fechas tan entrañables! Después de tres cuartos de hora nos fuimos a casa satisfechos por haber hecho agradable la mañana a los ancianos de la residencia. La próxima cita será en la fiesta de Reyes familiar el 9 de enero en salsa de 5 a 8 de la tarde. ¡No te lo puedes perder!
