Como todos los años a final de curso, un grupo selecto de los mayores ha hecho el descenso del Júcar, con sabor de aventura.
El viernes por la tarde solemos ir a pernoctar al raso. En esta época del año y con un saco de dormir en condiciones no debe haber problema (cuando escribo estas líneas las temperaturas han bajado y ya no es tan cómodo). Se “duerme” más o menos, siempre y cuando no te mosquees por los bichos, insectos, jabalíes, etc
Y a la mañana siguiente nos embutimos en el neopreno (algunos más que otros), el casco y a bajar por el río. Rápidos, pozas, saltos… A Guille se le fastidia el móvil pues la bolsa estanca no lo es tanto. De hecho solo hemos conservado unas pocas fotos que la cámara de agua de Jesús nos ha dejado.
Han participado Josemari, Jesús Sanz, Pablo Parreño, Pablo Tauler, Iván, Mario, Nacho Molina, Guille, Agus, Álvaro Ángel, Pablo Reglero. Cabe destacar el pelo de Pablo Tauler de color curioso, los rotos en los neoprenos de algunos y el pose cómodo de Guille en la cascada. El curso que viene volvemos.